No tienes que tratar de hacerlo TODO

El fin de semana pasado me enferme.

No fue un virus, no fue que intoxique con una comida. Mi cuerpo simplemente me dijo “si nos vas a para yo me encargo de frenarte”. Y lo hizo justo el día que iba celebrar mi cumpleaños. Le tuve que cancelar a los invitados y quedarme con la comida y el queque listo para la fiesta que no fue.

Esa noche mi mama vino a traerme una alcazelser y con esa sabiduría que solo las mamas tienen me dijo… “amor estás haciendo demasiado”. Sabía que me estaba diciendo una verdad… ya que inmediato se me llenaron los ojos de lágrimas.

Con mi afán de crear, de servir, de involucrarme, de decir que “si” a todo, había sobrecargado mi plato.

Así que domingo un par de días antes de cumplir 40 decidí que esta década la quería vivir diferente. No quería “crear o hacer” desde el “deber”, lo quería hacer desde el “amor”.

En este video les comparto lo que hice para definir cuales proyectos iba dejar ir, sabiendo que era lo mejor para mi. Permitiendo que mi corazón fuera lo que me estaba guiando.